En este siglo XXI estamos viviendo la era de la información, cada día hay nuevos descubrimientos, las organizaciones establecen programas y proyectos para contar con el Talento Humano que estén preparados para transformarse, reinventarse, gestionar el cambio y gestionar la incertidumbre.
Es un tanto alarmante que aun cuando las puntuaciones promedio del Coeficiente Intelectual de la población han aumentado en los últimos 50 años, las puntuaciones de Inteligencia Emocional y social, han disminuido y más aún en una época de crisis.
Goleman descubrió que la inteligencia emocional es dos veces más importante que el conocimiento académico o técnico para el éxito en el trabajo. En el caso de los cargos de responsabilidad, la proporción es aún mayor y explica más del 85% del “rendimiento estrella” en los mejores líderes.
En un estudio de 968 compañías representantes de los principales sectores industriales de EEUU, cuyos directivos administraban de manera efectiva a sus equipos (implementaban estrategias efectivas de administración y demostraban competencia personal en habilidades directivas), registraban en promedio un descenso en la rotación de personal de más del 7%, mayores utilidades de $3,814 por empleado, $27,044 más en ventas por empleado y $18,641 más de valor en el mercado bursátil por empleado, en comparación con otras empresas que tenían una administración de personal menos efectiva.
De otro lado, la Encuesta de Escasez de Talento, realizada por Manpower Group (2018), indica que el “43% de los empleadores peruanos dice que no puede encontrar las habilidades que necesita”, uno de los porcentajes más altos de la región, superado solamente por Argentina con un 53% (el promedio global de dificultad es 45%). Este porcentaje se incrementa para las organizaciones peruanas grandes (con más de 250 empleados), de las cuales el 54% indica que “sufren de escasez de talento”.
Muchas empresas o MYPES no toman buenas decisiones o tardan en tomarlas, esto se debe a que no conocen por completo el corazón de su negocio (Sus colaboradores); es por ello, que en este post hablaremos del adecuado manejo de las Habilidades Directicas y de Liderazgo para que las puedas implementar en tu empresa.
¿Pero que son las Habilidades Directivas y para qué sirven?
Las Habilidades Directivas son competencias de gestión para liderar una organización. Las habilidades directivas son conductuales, consisten en grupos identificables de acciones que los líderes llevan a cabo y que conducen a ciertos resultados, pueden ser observadas por otros. Se encuentran bajo el control del líder, pueden demostrarse, practicarse, mejorarse o frenarse conscientemente por uno mismo. Se pueden desarrollar, los líderes pueden mejorar su competencia en el desempeño de habilidades directivas a través de la práctica y la retroalimentación.
Las habilidades directivas están interrelacionadas y sobrepuestas, Las habilidades no son conductas simplistas o repetitivas; son un conjunto integrado de respuestas complejas. Los directivos eficaces, en particular, deben depender de combinaciones de las habilidades para lograr los resultados deseados. Por ejemplo, para poder motivar eficazmente a los demás, pueden requerirse habilidades como comunicación efectiva, motivación, Empowerment y autoconocimiento personal. Los directivos eficaces, desarrollan una constelación de habilidades que se sobreponen y se apoyan unas en otras y que permiten flexibilidad en el manejo de situaciones diversas.
Los análisis estadísticos revelaron que las habilidades caían dentro de cuatro grupos principales: 1) habilidades de participación y relaciones humanas (Ejemplo: Comunicación efectiva y formación de equipos de alto rendimiento), 2) otro grupo se centraba justamente en lo opuesto, la competitividad y el control (Ejemplo: habilidades de asertividad, poder e influencia), 3) espíritu de innovación y emprendedor (Ejemplo: Solución analítica y creativa de problemas), 4) se enfatiza el tipo de actividades opuestas, mantener el orden y la racionalidad (Ejemplo: manejo del tiempo y toma racional de decisiones). Una conclusión de este estudio fue que se requiere que los directivos eficaces demuestren habilidades paradójicas. Esto es, los directivos más eficaces son tanto participativos como muy impulsores, tanto fomentadores como competitivos. También son capaces de ser flexibles y creativos y a la vez ser controlados, estables y racionales.
Es por ello que mi objetivo es ayudarlos a desarrollar ese tipo de competencias y complejidades conductuales. A continuación, les presento 5 habilidades directivas muy importantes para llevar a cabo buenas prácticas directivas, basado en los pilares de la Gestión Empresarial.
- Inteligencia Emocional, se refiere a la capacidad de reconocer nuestros propios sentimientos y los ajenos, de motivarnos y de manejar bien las emociones, en nosotros mismos y en nuestras relaciones. Es aquí donde se desarrollan valores y competencias como el autoconocimiento, autorregulación, motivación, empatía y habilidades sociales. Es decir aprender a tener la capacidad de gestionarse a sí mismo y fortalecer las relaciones interpersonales, para convertirte en un líder que motive y mejore el rendimiento de sus equipos.
- Desarrollo de equipos de alto rendimiento, Toda empresa debe gestionar la diversidad y los valores generacionales. Hoy la mayoría de directivos triunfan porque identifican y desarrollan el potencial de sus colaboradores, tienen un propósito común, visión y estrategias para el logro de metas y a través del uso de la herramienta de gestión del Talento Humano (Nine Box), brindan la oportunidad de que el colaborador haga lo que mejor sabe hacer. Pueden hacer que sus equipos se transformen en equipos de alto rendimiento, en la manera como se toman decisiones, como se resuelven conflictos y cómo se establecen las relaciones al interior de la empresa.
- Comunicación efectiva y asertiva, Los seres humanos somos seres lingüísticos, somos seres conversacionales, entendemos que no solo las palabras comunican, sino el cuerpo también lo hace, los directivos deben desarrollar canales y técnicas para comunicarse a través de la escucha activa, empatía y asertividad; así mismo, de construir puentes con los colaboradores a través de la Kinesia, proxémica y paralingüística, a través de los sistemas representacionales como lo visual, auditivo y kinestésico; generando así, un ambiente de confianza y de opinión en los equipos.
- Coaching Ejecutivo y Líder Coach, Estilo gerencial que se nutre de los principios del Coaching para cumplir su rol de gerente y líder frente a sus equipos de trabajo. Ve en los colaboradores su futuro potencial y no su rendimiento pasado. Con actitud de líder coach podrás ayudar a tus colaboradores a que tomen sus propias decisiones, disfruten de su rendimiento y de su éxito. La labor de coach se enfoca en mostrarles a los equipos alternativas y los oriente a realizar cambios de comportamiento, de modo que puedan aprender de su propia experiencia, enfocándose en el crecimiento de los colaboradores.
- Liderazgo y motivación, Un líder primero debe ser líder de uno mismo, luego debe desarrollas competencias y moverse por el modelo de liderazgo situacional a través de los diferentes estilos de liderazgo del Siglo XXI, para que inspire a los colaboradores y equipos a llevar su rendimiento al máximo. La motivación es una de los gatilladores más importantes que debe manejar el líder, especialmente el desarrollo de sus equipos a través de la motivación intrínseca: Autonomía, competencia, afinidad y trascendencia.
Mi opinión
Los líderes con habilidades directivas son capaces de sacar a la luz todo el potencial de sus colaboradores y equipos, vincularlas a la empresa y conseguir que quieran hacer lo que deban hacer.
Todo empresario, emprendedor, gerente, director, profesional ejecutivo, funcionarios y todas las personas que deseen maximizar su potencial y rendimiento personal, profesional y empresarial, necesita reinventarse a través del desarrollo y fortalecimiento de sus habilidades directivas, verá y sentirá un futuro con beneficios fabulosos: Mayor rendimiento, mayor productividad, cultura de alto rendimiento, crecimiento y desarrollo personal y profesional, más tiempo libre para el líder, mayor innovación y creatividad, mayor satisfacción y retención de personal, mayor confianza, compromiso y colaboración.